martes, 1 de marzo de 2011

Otro sueño revelador



Hoy he disfrutado de un sueño consciente.
Esos sueños que ocurren cuando ya te has despertado, has visto que te daba tiempo a dormir una hora o un par de horas más, y has dicho, que bien, voy a dormir un ratito más, y entonces te pones a soñar de forma consciente, sabiendo que es un sueño pero sin darte cuenta realmente de que no estas viviendolo.
No se si me explico.

El caso es que yo mucha relación con mis cuñados (hermano de mi marido y mujer) no tengo, son una pareja un tanto extraña que no se relaciona mucho con la familia en general, vivimos en ciudades distintas y cuando vamos a pasar unos días suele venir mi cuñado solo con los niños (dos) y ella nunca viene, creo que no le cae muy bien mi marido y mi suegro así que se abstiene directamente. A mi me da lo mismo porque yo a quien quiero ver es a los niños la verdad, aunque los veo de uvas a peras claro. Por eso este sueño consciente me ha parecido tan raro. Resulta que directamente llegaba a una casa que no parecía la mía pero era igual, y mi cuñada, a la que hace como tres años que no veo facilmente, traía un bebe en su brazos. Parecía un niño pero me decía que era niña, una niña recién nacida muy bonita. Hablabamos y yo le decía que era preciosa, que se parecía mucho a ella. Ella decía que ahora se le parecía pero que seguro que cambiaba como sus otros dos hijos, que se habían parecido a ella y luego eran calcos del padre (en la realidad los niños se parecen a ella y de momento se siguen pareciendo a ella, y ella es guapa).
Me decía que me la dejaba porque se tenía que ir. Y yo me quedaba con el bebe en brazos, sintiendome completa al 100%. Esa sensación que tienes cuando has conseguido lo que más deseabas, pues eso.
Durante el sueño he estado cuidando del bebe con mi marido, le dabamos el bibe, le cambiabamos los pañales, le cambiaba la ropita, la abrigaba mientras dormía, era una muñequita con la que disfrutaba de sus cuidados. El caso es que después llegaba mi cuñada para llevarsela y me decía que la había cuidado bien, me hacía sentir como que había pasado el examen de madre. Y después me he despertado, deseando volver a dormirme para volver con esa preciosa niñita de la que he podido cuidar.

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