domingo, 12 de junio de 2011

Son las cosas de la vida....

Mi vida ha dado un giro de 180º.

El 4 de mayo nos dieron una malisima noticia con respecto a la salud de mi padre que haría que todos los castillos de arena que me había construido se disolvieran con la siguiente ola... tiene CANCER

Al principio me asuste mucho, volví a lamentar esa mala suerte que me persigue desde mi existencia y me volví a hundir-deprimir. Pero ya voy conociendome un poco y aunque sensible puedo decir que soy una persona fuerte, muy fuerte. Me di cuenta que en este momento mi padre necesita mi apoyo y esperanza para ser fuerte con todo lo que le está tocando vivir, y ya que no estudié medicina y no lo puedo curar, al menos puedo hacer que su vida sea mas fácil y al menos ofrecerle las esperanzas y positividad que un enfermo así necesita.
Por eso puedo decir que aunque tenemos en mente que puede pasar lo que nadie quiere tenemos muchas esperanzas en que se cure, y que mas adelante pueda hacer una vida normal con sus revisiones como es normal, y aunque sobretodo para el que es quien lo sufre puede resultar duro en ocasiones, hay que pasar por esto para que la vida siga, ojalá pueda darle un nietecito pronto para darle mas ganas de vivir y luchar por su vida...

Por otra parte, otros cambios radicales han afectado a mi forma de vida y en estos aún estoy comenzando... el 13 de mayo me dieron una carta en la empresa en la que me decían que el 31 de mayo zanjaban nuestra relación contractual, y además me exoneraban de asistir a mi puesto de trabajo el resto del mes, así que indemnizada (aunque no de acuerdo con el importe de la indemnización) me fui para mi casa tan contenta.
Y en ese momento me di cuenta de la gran losa que me quité de la espalda, debo estar loca pues no está la cosa para ir perdiendo trabajos, pero una de las razones que me provocaba el estado de ansiedad en el que vivía era ese trabajo, no por el trabajo en si, por todo lo que lo rodeaba, la empresa no me gustaba pues es una de esas P&A's (parientes y amigos) en las cuales es casi imposible la promoción, además tampoco valoraban mis esfuerzos y me negaban una y otra vez los aumentos salariales aludiendo el estado de crisis del país aun siendo una de las corporaciones con más beneficios de mi comunidad. Debe ser que teniendo esto tan claro me había rendido ya y no tenía motivación ninguna para continuar. Desde ayer soy oficialmente una de esos 5 millones de personas que están en la cola del paro.

Y desde el 1 de junio siento que soy más feliz.

Ante mi se plantea una temporada extensa en la que debo realizar varias cosas importantes para mi:

- Ayudar a mi padre a pasar esta enfermedad y superarla

- Quedarme embarazada (ahora tengo dinero para realizarme un tratamiento de FIV en el IVI)

- Estudiar lo que realmente me gusta de toda la vida

- Seguir con mi dieta y terminar de perder los 6 kg que me sobran.

Y seguir siendo feliz.

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